La inversión extranjera en Colombia se está volviendo un caso bastante atractivo en el país, ya que se está aperturando económicamente nuevas vías para el emprendimiento.
Se analizaron las normas más importantes en materia tributaria, referentemente a lo fundamental del Gobierno Nacional, esto se está brindando para mejorar las condiciones de los inversionistas con el propósito de atraer capital extranjero a Colombia.
De igual forma se estableció una tarifa efectiva del impuesto de remesas que han pagado las sucursales extranjeras en Colombia desde 1993 al 2004, dicha base fue presentada en las declaraciones de renta de este tipo de contribuyente. En 1993 el indicador se ubicaba en el 7.3%, año que partió de la disminución puntal hasta ubicarse en el 0.5% en el 2000, con estos datos podemos asumir que el Gobierno de Colombia está apostando a un crecimiento exponencial en ese ámbito y referentemente a 4 tipos de inversión principalmente.
Se pueden definir 4 tipos de inversión extranjera en Colombia los cuales son:
Aportes en especie: pueden hacerse en bienes tangibles e intangibles. En el primer caso (aporte de bienes tangibles), el aporte se hace a través de la importación no reembolsable de maquinaria, equipos u otros bienes físicos.
Aportes en dinero: se llevan a cabo a través de la importación de divisas que son convertidas en moneda nacional, ya sea para realizar un aporte directo al capital de una empresa
Capitalización de recursos en moneda nacional con derecho de giro al exterior: son aquellos montos que pueden transferirse al exterior, como los que se deban pagar por concepto de créditos externos, de importaciones reembolsables
Inversiones en sucursales constituidas en Colombia por personas jurídicas extranjeras: puede realizarse como inversión inicial al capital asignado a la sucursal o como inversión suplementaria al capital asignado de la misma.
Con esto por parte del gobierno de Colombia se espera la evolución del flujo de capital extranjero al país y su aporte a la tributación nacional, en la perspectiva de proponer mejoras a la actual estructura tributaria que promueva la inversión, sin perder de vista los principios constitucionales en esta materia y se tenga en cuenta la armonización tributaria